Testimonio de Arantza Ipiña
En esta semana en la que nos disponemos a celebrar con gozo el 140 aniversario de la fundación de nuestra Congregación que es eminentemente misionera, compartimos este bello testimonio de una vida entrega en misión sin fronteras.
Nosotras, queremos recorrer los caminos del mundo y de la Iglesia desde la merced de Dios que hace salir el sol todos los días para todos sus hijos, especialmente para los pobres, invitamos a aquellas personas que sienten en su corazón el deseo profundo de “curar todas las llagas y remediar todos los males”, como decía nuestro querido Fundador, para asociarse a nuestra misión evangelizadora y social en la Iglesia.